martes, 29 de julio de 2008

Guardiola y el corre-corre que te peto'o.

Este es uno de los veranos más anodinos que recuerdo. Lo mido por el grado de aburrimiento que me generan las portadas de los principales diarios deportivos, de los que me declaro atroz consumidor. Ni un titular espectacular al uso de los fichajes bomba de Núñez, ni ninguna descabellada idea para encontrar un crack que active a este Barça... si bien la gran parte de ellas salian de la calenturienta mente de algun redactor sin escrúpulos y eran puras ilusiones, permitian que mantuviera la esperanza de que hasta el cierre del mercado cualquier operación era posible. Pero en la hoja de ruta del "amic" Napies no existía lugar a la improvisación. Cada movimiento de mercado se realizaba con tan suma anticipación que el margen a cualquier movimiento que puedira romper esta linea era totalmente utópico. Con esta mentalidad y el buen viento llegaron Van Bommel, Ezquerro, Guddy, Thuram, Zambrotta, Milito, Abidal, Touré y Henry. Los culebrones se guardaron en el cajón del pasado, olvidados des del fichaje de Eto'o ; y que quieran que les diga, me gustaban, eran la salsa de mi ensaladilla veraniega.

Pero por una vez la tan cacareada matemática planificación no dio sus frutos por una mala gestión de los recursos adquiridos. Dos años de crisis, cero títulos y una moción. Los agravios y prepotencia de la directiva hicieron hervir la sangre del socio que se movilizo en pleno mes de julio para decir que querían un cambio de rumbo. No fue suficiente. Sólo unos cuantos comprendieron el mensaje y abandonaron la nave. Los culpables de la crisis siguieron en ella, sentados (mejor sería decir encolados) en doradas sillas desde las cuales siguen haciendo y deshaciendo a su antojo. Primero nos colaron a Guardiola y vendieron un mensaje de renovación profunda ligado siempre a la palabra ilusión. En el nuevo mapa astral del futuro blaugrana aparecian los nombres en negro de 3 jugadores que, por aptitudes y actitudes, se les responsabilizaba de los descalabros recientes. El nuevo proyecto, con plenos poderes y confianza para el Pep, despegaba con el destierro de esos 3 cracks caducos, lo que debía impulsar con fuerza el rodar de un nuevo círculo virtuoso. La estrategia fue erronea, pues partió des del desprestigio y la marginación, lo que redució el beneficio. Pero parecía ir en serio. Salieron Deco por una miseria y Ronnie por un precio aceptable. De los otrora 3 reyes magos sólo quedaba uno, el negro; pero también se acercaba su hora (o eso creíamos).

Mientras tanto, llegaban jugadores sin demasiado pedigrí a precios de susto y se escogía la fragilidad personificada como pilar deportivo del nuevo proyecto. Y en las verdes tierra escocesas empezó la pretemporada y volvió el sudor. Aqui Guardiola empezó a ganarse a la gente, con el trabajo diario y la voluntad de abolir el gimnasio y el absentismo. Nos esperanzamos. Pero todo el mundo sabe que para ganar no basta sólo con un buen bloque , sino que se necesita algun crack (2 es la cifra precisa) en posiciones de ataque para poder lidiar en todas las competiciones con posibilidades de ganar.

Salieron muchos nombres , pero el que no salia era Eto'o. El tercero de los proscritos, el amigo del presidente, el conspirador en la sombra, el atareado profeta de lengua viperina. De repente todo emepezó a olerme mal. Llegaron los primero partidos y las primeras alineaciones. Apareció y jugó. Se empezó una campaña para palpar la voluntad de la gente respecto a este jugador y la capacidad de recuperarlo a ojos de la afición (cosa que no permitieron con los demás, sentenciados y elimiandos de forma mucho más fulgurante, como quien limpia un plato con aguarràs). Se dió margen a la duda y mis sospechas se vieron colmadas ayer con sendas declaraciones de apoyo, las primeras de los jugadores (un corporativismo respetable) y las segundas del presidente (mucho más preocupantes e incomprensibles).

Cuando el molino de la ilusión empezaba a funcionar y a moler los disgustos del pasado con un nuevo discurso y forma de enteder la gestión de un grupo de elite, ponen una piedra en el engranaje que frena toda la maquinaria y genera dudas en el molinero recién llegado. El proyecto de Pep es uno con los nuevos (y absente de reliquias del pasado) y otro con la inclusión de la semilla de la discordia. Si no siguieron Ronnie y Deco, si por convicción se afrontaron sus operaciones de liquidación sin dilación, Eto'o no puede ni debe continuar por ser igual o más responsable que ellos y tener (en la misma medida) igual perdida de crédito a ojos del seguidor culé. Su inclusión en el proyecto sería una nueva mentira calculada y dotaría de fragilidad a un proyecto que se alejaría de la coherencia para caer en manos de la inestabilidad. Una temeridad que Guardiola y el Barça podrían pagar muy caras si los resultados y el rendimiento y compromiso del susodicho distan de las previsiones optimistas (Situación la mar de factible)

Este movimiento es incompresimble y sólo se sustenta en la incapacidad de colocar un producto que tu mismo has desechado y de encontrar un sustito válido; o en un falacia milimétrica que te ha permitido eliminar lo que te sobraba sin agitación de la masa social, escudado en la paridad de trato a todos los cracks inservibles. El Barça juega con fuego, pues ha dejado para el final las tareas más difíciles y comprometidas : la contratación de un goleador y el fichaje de un once que ocupe el vacio ( en todas la dimensiones en que un jugador pude tener significación) de Ronaldinho (la caida del cual fue sincrónica a la del equipo y da que pensar). No sabemos como Txiki y Laporta pueden reaccionar en los mares de la improvisación cuando han remado siempre con la antelación por bandera.

Todo ellos se suma al caso Messi, ya de por si bastante triste por los que incumbe al considerado crack del nuevo proyecto. Un crack comprometido con su pais y que huye de quien le llena generosamente el bolsillo. La esperanza inicial que destiló el proyecto Guardiola empieza a verse oscurecida por unos acontecimientos que golepan con fuerza lo que deberían ser los cimientos del nuevo Barça. Nos estan embaucando tal y como también embaucaron al Pep. Le prometieron una hoja blanca y limpia donde escribir el futuro del Barça y se ha encontrado un papel garabateado que reza: Pep, corre- corre que te peto'o.


lunes, 7 de julio de 2008

El Motín del Bacon

Como todos sabrán , la votación de la moción de censura finalizó con el resultado que personalmente no deseaba; y más, después de ver las declaraciones que efectuó el sr. presidente del F.C.B justo al finalizar els escrutinio de la votación y a lo largo del dia de hoy.
El sr. Bacó salió sonriendo dissimuladamente a la sala de prensa, poco después de que se comentará entre bambalinas que al 91% del escrutinio ya se viera que no prosperaba la moción y se celebraran los resultados con una euforia desmedida ( inclusive discurso presindecial a los suyos, a los que si tiene que pedir perdón, no fuera que se quedara solo) en lado presidencial. Y se vió al Laporta que temía. Al que se enroca e interpreta falazmente los resultados, al que manipula con fervor pero sin capacidad de convicción. Al que se ve legitimado para proseguir como presidente con un 61% de los votos en contra. Al que ama su silla dorada y menosprecia la voluntad de la mayoría. El socio no pinta nada hasta que los estatutos lo hagan irremediable. Con un 65% de los votos en contra hubiera proseguido con idéntica actitud.

Esta actitud sólo le empuja pendiente abajo en su particular descenso a los infiernos. El presidente más votado de la historia ha pasado ha ser el primero que pierde (por votos) una moción de censura y con unos resultados que reflejan un rechazo más que notable. El interpretará lo quiera, pero la lectura immediata es cristal·lina : el socio no le quiere. Se sentirá legitimado por los estatutos (que jugaban claramente a su favor, al tener que reunir los impulsores del voto 2/3 de los soportes para que prosperara la moción) y también moralmente (algo más personal y singular, pero de inquebrantable cuestionabilidad). Ahora el club se halla en una profunda fractura, con la balanza inclinada hacia la crispación popular, con todo lo que ello implica a nivel de tener que rehacer un proyecto deportivo. Habla de ilusión, de verse capacitado... pero se ha expuesto al presbícito dominical, el que obliga a que la pelota entre independientemente de cualquier razón, pues el tiempo de la excusas ya ha caducado. Esta presión sólo se reflejará en la necesidad de victoria constante por parte de un grupo recién creado, sin margen de error a pesar de que la gente en las encuestas de ayer diera su confianza al proyecto Guardiola. Todo esto sume al club en un estado de tensión permanente, con pañolada a la vuelta de cada esquina (lease jornada), con valoraciones a diario, críticas constantes, mirando con lupa cada movimiento,... es decir, confianza cero.

Todo ello tiene una fàcil y sensata solución: la dimisión. Su marcha abriría un proceso que significaria un oasis en la mitad del camino para recobrar la tranquilidad y la cohesión social. Pero es demasiado orgulloso para dar este passo. Puede que él sí. Pero el jueves hay una junta en la que se puden dar sorpresas, todas ellas (en caso de darse) fruto de la honestidad por parte de unos directivos que si habrán sido capaces de comprender la voluntad del socio.

Otro aparte merece la participación, excelente en unas condiciones dificilíssimas para el sr. Giralt y amigos. En una jornada marcada por la cordialidad y la voluntad del socio de mostrar su voluntad, el dia fluyó al ritmo de unos actividades que dotaron a la diada de un tono festivo que, en primera instancia parecia inadecuado (dado el sentido de la votación), pero que personlamente se agradeció, como si fuera una recompensa poder gozar de un clima barcelonista pseudo-festivo en tan sofocante domingo de julio.

A Guardiola le deben temblar las piernas ante el voltaje trepidante que suma la previa de la Champions. El sr Giralt se ha agigantado con unos brutales resultados ( a lo largo de todo proceso) y estaré expectante ante su nuevo futuro en el entorno blaugrana ( a pesar de repetir que se volvería sigilisomanete a su posición de socio anónimo). El sr Núñez se emocinó y solto un par de perlas patrimoniales tras 8 años de respetuoso ( y cómodo) silencio. Sandro tendrá tiempo de preparar su puesta a punto para 2010. Y Laporta y los suyos seguirán navegando en las agitadas aguas del rechazo y con la posibilidad de ver, ante cualquier nuevo azote climático, como sus lugartenientes abandonan la nave y le dejan remando sólo con Txiki-Txiki, camino de la tierra prometida, viaje que los conspiradores y la mayorias silencioasas ( de similar quantía que las que le impulsaron en su ascenco meteórico) han intentado impedir. Lo peor de este trayecto infame serán los daños colaterales efectuados en una nave que le hubiera valido un cambio en la capitanía, un valiente golpe de timón, que le evitara tan agetreado viaje hacia quien sabe donde. Lástima sr. Bacon, y no diga que le venía de nuevo, porque Cruyff ya lo sabía.

P:D: Lo que nos vamos a divertir en los proximos dias /meses. Primero los fichajes, con más que una segura sorpresa para hacer trempar al socio que ha perdido la líbido futbolística (Adebanorr).Segundo con la tensión en la previa de la Champions, con un Messi mejor pagado pero ausente como siempre que se le requiere. Y a lo largo de la temporada con las declaraciones de un sr. que parece incapaz de rectificar y al que le importa un pimiento la massa social. Que sepa que él a nosotros no, pues quedó claro que no deja indiferente, no le queremos. Lo notas Jan ? Aunque te obstines en adherirte, ya se mueve tu adorado sillón. Y te aseguro que el suelo no es ni 2/3 más cómodo que tu apreciada butaca. Acostúmbrate !

martes, 1 de julio de 2008

Pesadilla en Bacon Street

Hoy me voy a permtir el lujo de incordiarles con una de mis recurrentes pesadillas futbolísticas de los últimos tiempos. El sueño en cuestión se escenifica alrededor de los mismos personajes, que repiten una y otra vez de forma grotesca sus fechorias más conocidas ante un humilde servidor, que contempla tan esperpéntica escena preso de la impotencia. La oscuridad se ciñe al escenario volviendo la atmosfera asfixiante. 3 focos principales emmarcan las escenas responsables de mi ansiedad. En una de ellas se observa un hombre de nariz desproporcionadamente afilada jugueteando ante una pantalla con un mando estraño. Al tomar angulo se observa una gigante pantalla de teletexto ante la la cual el hombre parece fascinado, como escrutando una pista que huye del raciocionio humano casual para hacerse patente en su mente privilegiada (tiene cara de ser el más listo de la clase). Atareado, recoge datos y analiza la monotona pantalla de forma enfermiza hasta que canvia el canal, cambiando también de actitud. Ésta se vuelve más relajada, se apoltrona en el sofá y contempla sereno el programa, garabateando distraido una libreta. Empieza FutbolInt.

En otro foco, un hombre con planta sacude un puntero cual sable láser estelar, señalando una pantalla pintada con el rimbobante colorido de los gráficos del Power Point. Canvia diapositivas y señala tablas, cifras, saca conclusiones intangibles y repite obsesivamente una palabra que se vuelve vacia en mi mente: Superávit. Al límite de una crisis comicial, cae extasiado encima de unas gruesas alfombras que parecen mangadas de un hotel de la cadena Hesperia. Con su peso se garantiza que jamás seran levantadas, impiediendo la higienización que asegure la salubridad de lo que no cubren (Entre otras sopresas que puedieran ocultar).

El tercer foco es el más grande y se encuentra en el centro destacado. Un hombre con aires aristocráticos parece arengar una masa humana adormecida con un discurso casi militar. Entre tanto fervor dramático, interrumpe su clase magistral con un ademán de desprecio, como icomprendido por la masa que intenta aleccionar. "Pobres", piensa, " No saben que me asiste el profeta, pues a mi sólo ha sido revelada la verdad del fútbol". Se aleja de la escena un poco y da la espalda al público, como si no estuvieramos, marginándonos en la silenciosa oscuridad del patio de butacas. Me siento confuso y despreciado y me entristece la actitud de aquel pequeño hombre altivo, que ahora parece zampar canapés y beber cava de forma compulsiva, como si el catering de lujo que atraca fuera su cortijo particular.

En el clímax de la obra y cuando estoy apunto de abandonar la función ante tal horrendo espectáculo, una voz atruena la sala y asusta a los 3 protagonistas, que pronto cambian de actitud.

El hombre a una nariz pegado (perdonen el plagio a Quevedo) ahora ordena un montón de informes que a la vez parece contrastar con dvds de imagenes llegadas de todo el planeta futbolístico. Hace llamadas a amigos esparcidos por medio globo y también a una agencia de viajes para comprar un par de billetes de avión a paises exóticos. El sr del Power Point se levanta y ofrece un discurso más próximo, con cifras ordenadas y comprensibles. Pide disculpas al público, cosa que el sr de la nariz ha olvidado hacer ante tanta tarea. Las pesadas alfombras, eso si, restan inmóbiles, de manera que me olvido de cualquier truco ilusionista con conejos y de cualquier sopresa que puedieran ocultar. Pero la auténtica metamorfosis la protagoniza el que ocupa el centro de la acción. Movido por unos hilos que con los cambios de iluminación se han hecho patentes ( un titiritero holandés con vocación de ventriluoco y con pedigrí, aunque vencido por su vena de hijo del balón , se encarga de los movimientos de su fiel putxineli) cambia de actitud y se vuelve hacia el público, abandonando los cuatro canapés de dátiles con bacon que quedaban. Ya no hay casi nada de aquel ostentoso catering, pero invita el público a subir, pidiendo perdón por su glotoneria y actitud desconsiderada. Se vuelve más servicial e intenta tranquilizar a los espectadores que más han abucheado su actuación (pequeños corpuscúlos de exaltados que responden al nombre de peñas). Habla de sus preocupaciones, de que todo irá bien, de que vencerá su Mr.Hyde y dejará de inculpar a todo el mundo y al fantasma de la prensa de sus penosos actos y errores. Pero no convence y los gritos van en aumento. De pronto, un globo en forma de rechoncho hombre enfadado sobrevuela el escenario y el pánico de los protagonistas aumenta. Se oye la voz de un antiguo amigo del protagonista, que marchó repudiado por el flemático dictador , víctima de sus éxitos y de la envidia más atroz. Incluso se oye alguna palabra en portugués. Las voces y espectros alteran el ánimo de los protagonistas para mal, y el de los espectadores para bien, que ven recompensado el precio del ticket con un espectáculo renacido.

Pero la sorpresa esta por llegar. La voz de megafonía vuelve de nuevo para dar un toque interactivo a una obra en la que el público no pintaba nada hasta el momento. Y como en una novela de esas de "escoge tu final", nos permite decidir si nos ha gustado la obra con unas grandes papeletas que se ecuentran en el lateral de la butaca. Hay tres en concreto. Una en blanco indiferente, una con un SÍ (la he avorrecido) y una con un NO (me ha encantado). El público toma el control y realiza su particular referéndum. Con un esperítu más alegre, me dispongo a castigar tan infame obra ( y tantos otros malos ratos) y cojo la papeleta del SÍ. Emocinado con ver la escena final y con los ajusticiados de rodillas, me dispongo a comprobar el resultado... y suena el despertador. Me disgusto es tremendo. Es uno de julio. Ya queda menos para el dia seis.

P.D: Espero que no les haya hastiado mi psicodélica pesadilla blaugrana. Mi disgusto particular de hoy ha sido la venta de Deco por 10 millones al malgastador Chelsea de Abramovich (que no hace tanto pagó 20 kilos por el fallón Anelka). Es lamentable este nefasto nivel de gestión y la incompetencia en el servicio técnico de este club. Pagas 14 por Keita, 16'5 por Cáceres... que no son nadie al lado de un Deco que ha hecho una notable Eurocopa, además de ser uno de los mejores centrocampsitas del mundo en el último lustro. Pero Pep, Txiki y el resto se lo cargaron hace tiempo y se han visto obligados a malvenderlo. Incluso por Giovanni podemos ingresar más que por Deco, por el que hemos recibido lo mismo que por Zambrotta. Espero no sufrir su fútbol en Champions vestido de Blue. Y mientras tanto, Txiki-Txiki despierta su vena de ojeador y parece cumplir su trabajo buscando promesas en Brasil. Y parecen interesantes sus movimientos hasta que se ven los precios que paga. Con esa napia, ni rapado cuela por Monchi. Ha pagado 10 kilos (lo que vale Deco superstar) por un central desconocido de 18 años que se va a ceder: Henrique. Si, sí, con hache de... hecamtobe. Vaya, que un desastre tras otro. Pero ya queda menos para domingo, una cita que afronto impaciente, pendiente del Final Countdown con una sola palabra en mi mente blaugrana: Sí (a la puta calle incompetentes).